Desayuno viendo el mar en nuestro
apartamento. Y al centro de buceo a sumergirse en el Caribe. Hemos ido con 4
Dive masters y el capitán, Alexis. Todos muy jóvenes y simpáticos. Ha sido muy
divertido y hemos hecho dos inmersiones preciosas. Una en unas grutas abiertas,
se llamaba Polo Beach, y está por el lado de fuera de la isla Bastimentos. Y la otra por ahí cerca en una zona de coral llamada Sashe o algo así.
Entre medias hemos
parado en la playa cerca de la primera inmersión, y allí los chicos de BocasDive Center han sacado una neverita con aguas, cocacolas, galletas, patatas,
chupa-chups, aceitunas rellenas, salchichas con tomate… menudo atracón nos
hemos pegado! Los buceos han sido preciosos y a poca profundidad (porque apenas
cubre) y han durado en torno a una hora cada uno. La visibilidad era buena pero
íbamos mucha gente y en algún momento me agobiaba un poco tanta aleta y tanto
movimiento y algún golpe me he llevado.
Parada entre inmersiones en Polo Beach |
Hemos cenado en La Italiana unas pizzas y una ensalada y de vuelta a nuestra casa (Dios, cada vez que pienso en esa casa… me escaparía allí ahora mismo. Pero volvemos al tema). Agregué al Facebook a Victor, uno de los Dive masters de Bocas Dive Center (que es igualito igualito que mi primo Miki) y enseguida empezó a hablarme… vamos, que me vino a buscar a la casa y nos fuimos por ahí a pasar la noche. Primero al centro de buceo, con Alexis (el capitán el barco, un chico de 17 años, que hace unos días cumplió ya los 18) y mas gentecilla que estaba por ahí en el bar divirtiéndose, sobre todo turistas. Luego conocimos a unos chicos argentinos que van a abrir una heladería en Isla Colón y para terminar fuimos a La Iguana, el sitio de fiesta típico de Bocas del Toro (junto con Barco Hundido, que me quedé con ganas de conocerlo). Y allí me presentaron a Jeannel, una chica super simpática con la que estuve bailando toda la noche. Todos juntos nos tomamos unos chupitos de tequila con limón y sal y estuvimos bailando y riéndonos hasta bien tarde. Acabamos en la orilla del mar, Victor, Yanara y yo, hablando bajo las estrellas. Fue una noche improvisada, como las mejores noches J
La calle más transitada de Isla Colón |
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